Cobardía Cap 3

CAPÍTULO 3

Todo ocurrió cuando tenía 4 años, Shim Changmin era feliz según su propia descripción, era el niño más afortunado del mundo

¿Por qué?

Simplemente por tener la mejor familia del mundo, tenía 2 padres maravillosos que lo cuidaban y lo querían, que lo abrazaban cuando lo necesitaba, jamás lo habían golpeado o de la manera en que lo veía Changmin, era simplemente que lo quería y le demostraban lo mucho que lo querían, eso para él era suficiente.

También tenía una hermana 2 años mayor que él a quien quería mucho, era muy raro que ellos 2 se pelearan y las pocas veces que lo hacían era por culpa de SuJin según Changmin cuando ella lo trataba como un bebé cuando sabía que lo detestaba.

Per o fuera de eso todo era perfecto hasta ese día…

Changmin le temía a las tormentas y toda su felicidad junto con todo lo que creía se destruyó en una noche de esas.

Normalmente alguien iba a su habitación y dormía con él y el estar con otra persona podía dormir tranquilamente, por eso cuando la puerta se abrió no se sorprendió.

Se preguntó quiñen vendría a verlo, su madre, tal vez su hermana, pero el olor masculino que llego a su nariz cuando aquella persona entró a su cama  hizo saber que era su padre y sonrió.

Cerró los ojos con una gran sonrisa, ahora si podría dormir tranquilo, poco después sintió la mano de su padre acariciar su cabello, aquello realmente lo relajaba y lentamente se fue quedando dormido.

Sin embargo antes de hacerlo Changmin sintió como su padre beso su nuca y contrario a relajarlo le puso los vellos de punta.

Intento moverse para mirar a su padre y averiguar qué es lo que pretendía, sin embargo antes de poder hacer algo su padre lo aprisiono contra la cama quedando su cara sobre el colchón para luego sentir su cuerpo sobre el suyo.

¿Qué es lo que estaba haciendo?

Intento decir algo pero pareciera que su padre leía sus pensamientos, porque le puso algo en la boca para que evitara que algún sonido saliera de su boca.

Poco después sintió como le quitaba sus pantalones y ropa interior con desesperación, Changmin sintió el aliento de su padre contra su nuca y sintió asco ¿Qué le iba a hacer?

-No te muevas pequeño, o realmente te dolerá-

 La voz de su padre no sonaba igual que siempre, ya no tenía el tono cariñoso con el que siempre le hacía daño ya antes de poder pensar en algo sintió algo rozar su trasero para luego enterrarse dentro de él las lágrimas salieron en ese mismo instante y de no haber sido por la mordaza de su boca un horrible grito de dolor habría salido.

La pequeña mente de Changmin se retorcía de dolor junto con todo su cuerpo, aún no entendía que es lo que había hecho mal para que su padre lo castigara de esa manera.

Aparte del dolor Changmin sentía un líquido correr por sus muslos y dejo de prestarle atención cuando el dolor se incrementó cuando sea lo quesea que su padre había introducirlo en él comenzaba a moverse.

Él solo quería cerrar sus ojos y que todo el dolor desapareciera, el tiempo pasaba y el tormento solo empeoraba para Changmin, tenía tantos rasguños por las uñas que se enterraban en su piel y juraba que le saldrían moretones de los golpes que le daba y la fuerza con la que agarraba sus caderas.

Para cuando su tortura terminó su cuerpo simplemente se desplomo cuando su padre por fin lo soltó.

Su cuerpo solo temblaba y temblaba, no quería sentir tanto dolor.

Cuando la mordaza estuvo fuera, sus sollozos por fin fueron escuchados.

Con la poca fuerza que le quedaba logro sentarse y el dolor fue indescriptible en su parte baja. Su vista se enfoco en su cuerpo y pudo notar como la sangre y un líquido blanco y algo espeso salían de su cuerpo hasta manchar su cama; levantó su rostro lleno de lágrimas hacía su padre quien terminaba de vestirse.

-¿Por qué?- Apenas pudo susurrar, pero su padre le puso atención -¿Por qué?- Volvió a repetir y él solo le sonrió, una sonrisa tan asquerosa que Changmin tuvo ganas de vomitar en ese mismo instante.

Se acerco a él lentamente y Changmin intentó retroceder, pero no pudo, su cuerpo estaba demasiado débil.

Su padre volvió a subir a la cama y lo beso, no fue simplemente un pico de pájaro, fue demandante y brusco, incluso uno de sus labios se abrió cuando este se lo mordió.

-¿Qué a caso no te gusto pequeño?- Changmin quería alejarse de ahí y su cuerpo no dejaba de temblar –Sabes, bien podemos repetirlo- Aquello lo susurro en su oído para luego pasar su lengua por ella.

-Mamá- Susurro  -Mami- aquellos susurros lentamente fueron subiendo de volumen, eran los llamados de auxilio desesperados de un pequeño niño y cuando estuvo a punto de gritar un sonoro golpe se escucho en la habitación.

Su padre lo había golpeado para callarlo, ahora su cuerpo ya no lo sostenía, su espalda choco contra el colchón y nuevamente tuvo a su padre sobre él.

-Mi querido niño- Changmin volvió a escuchar ese tono cariñoso, pero simplemente ya no le tenía confianza y menos con esa mirada sínica –Esto será nuestro secreto-

Changmin sintió un escalofrió cuando aquellas manos acariciaron su cabeza y en un impulso se la quito de encima y se gano otro golpe.

-¡Jamás me oyes, jamás vuelvas a rechazarme!- Ese no era su padre, él jamás lo golpearía o le gritaría y mucho menos lo hubiera torturado de esa forma. Un gemido de dolor escapó de los labios de Changmin cuando su padre halo su cabello –Escúchame bien, porque solo te lo diré una vez- Halo más fuerte su cabello –Esto se quedará entre nosotros ¿Entendiste? A menos que quieras que haga lo mismo con tu hermana-

Changmin no pudo evitar abrir sus ojos ante aquella amenaza y sintió como su corazón se detenía por un momento.

No su hermana, no podía permitir que ella sufriera lo mismo, simplemente no podía, varias imágenes de su hermana aparecieron en su mente, como si estuviera viendo un video y en cada una de ellas le sonreía, lo protegía, lo cuidaba…

¿No era ahora su deber hacer lo mismo por ella?

El solo ver su sonrisa opacada hacía que su pequeño corazón se encogiera y él no iba a permitir eso.

-Así que… ¿Tenemos un trato mi pequeño?- Changmin solo asintió y su padre sonrió –Me alegro de que ambos estemos de acuerdo, verás que no te arrepentirás-

Por último su padre se levantó y salió de su habitación, en esos momentos ya no sabía a que temerle, si a la tormenta o estar con su pare en una noche así.

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Desde aquel día la vida de Changmin se volvía un infierno, sobre todo en las noches con tormenta, ahora las odiaba aún más porque era cuando su padre se aprovechaba de él ya que tenía la excusa para entrar a su recamara.

Ya no sonreía y eso empezaba a preocupar a su madre y hermana, y Changmin es lo que menos quería, pero no podía evitarlo, la única emoción que demostraba era el miedo cuando su padre estaba cerca y era cuando se aferraba a su madre como si su vida dependiera de ello, para él era su tabla de salvavidas, aunque su madre no lograba comprenderlo.

Aquella tarde todo era alegría, todos reían y se divertían excepto Changmin, la familia de su madre estaba ahí, era una reunión familiar y Changmin lo disfrutaría un poco más si no fuera por los truenos y relámpagos.

Aquella noche abría tormenta ya la mirada lasciva que le enviaba su padre sospechaba lo que pasaría esa noche y solo pudo tragar saliva y rezar que el tiempo pasara muy lento.

Sin embargo para él aquellas 5 horas fueron las más rápidas  de su corta vida.

Al haber empezado la tormenta su madre hizo que su familia se quedara y comenzaran a acomodar las habitaciones y se alegró al saber que compartiría su habitación con su tío Yunho, el hermano de su madre, eso realmente lo tranquilizaba, al menos por esa noche dormiría tranquilo y seguro.

Y al parecer a su padre no le agrado la idea porque cuando nadie lo veía pareciera que quería matar a su tío con la mirada.

Changmin no pudo evitar sonreír después de 3 meses y sin embargo aquella felicidad duro lo que un suspiro cuando su hora de dormir llegó.

Él, su hermana y su prima tenían que irse a dormir, sus padres, sus abuelos y sus tíos se quedarían un rato más y su padre se aprovecho de eso. Se ofreció a llevarlo con la excusa de que no podía estar solo por la tormenta…

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Había pasado media hora desde que los niños se habían ido a dormir junto con su hija y su sobrina, su cuñado se había ido para acompañar a Changmin, ya que según  la explicación de su hermana le daban miedo las tormentas.

Al final se quedaron menos de lo que esperaban cuando su hermano bostezo por milésima vez y decidió que era hora de dormir.

Ambos subían por las escaleras aún conversando y riendo hasta que llegaron a la habitación de Changmin y se despidieron.

­-Ahorita te envió a tu esposo hermanita-

Y sin más abrió con cuidado la puerta  de la habitación, no quería despertar a Changmin y cuando entró sintió como su alma se le escapaba.

No, no podía ser cierto, sus ojos lo estaban engañando y no pudo evitar quedarse ahí viendo como Changmin era violado por su propio padre.

Un sonido lo saco de sus pensamientos y notó que lo había golpeado pero ¿Por qué? ¿Por qué un padre le haría eso a su propio hijo?

-No quiero que le vuelvas a sonreír así, al único que le puedes sonreír así es a mi ¿Entendiste?-

Changmin lloraba y lloraba y él no estaba haciendo nada, pero no podía evitarlo, simplemente no podía moverse, aún no quería creer lo que estaba sucediendo, aún quería creer que estaba soñando.

Dio un rápido vistazo a la escena de nuevo, el rostro lleno de dolor y lágrimas de Changmin estuvo en su vista, al igual que como las sabanas estaban cubiertas de sangre.

Con eso fue suficiente para hacer a su cerebro reaccionar, su cuerpo se movió rápidamente y sin pensar 2 veces tomo el hombro de su cuñado, quién giro a verlo y sin más lo golpeo, haciendo que cayera de la cama y quedara inconsciente.

Rápidamente volteó a ver a Changmin y su corazón se encogió al ver como aquel pequeño cuerpo tenía tantas marcas de golpes y rasguños al igual que la sangre y las lágrimas corrían sin detenerse.

Yunho trato de acercarse, pero cuando su llanto y su respiración se hicieron más fuertes  se detuvo, Changmin le tenía miedo y no lo culpaba.

-Tranquilo- Le susurro para calmarlo –No te haré daño- Lentamente se acerco a él para no volver a  asustarlo –Todo está bien ahora ya no te va a lastimar-

No dijo más, Changmin corrió hacía sus brazos y no dudo en responderle.

-Ya todo está bien- Le susurraba mientras que acariciaba su cabello lentamente.

No supo cuanto tiempo paso y hubiera creído que su pequeño sobrino se había quedado dormido si no fuera porque cada cierto tiempo se aferraba a él con más fuerza.

Una vez que su llanto se convirtió en sollozos Yunho lo separó de su cuerpo aunque le costó algo de trabajo, ya que no se quería despegar de él, cuando lo logró lo recostó sobre la cama y lo cobijo con una sabana.

-Tranquilo, ahorita regreso-

Yunho abrió la puerta que conducía al baño y llenó la tina con agua caliente y regreso con Changmin, quién estaba un ovillo en su cama.

Yunho lo vio ahí tumbado mientras su pequeño cuerpo temblaba y no podía evitar sentir un nudo en su garganta.

Todo lo que había sucedido debió de ser muy fuerte para un pequeño de 4 años y quizá saber desde cuando su padre había estado abusando de él. Esto iba a acarrearle cicatrices emocionales para el resto de su vida y le iba a costar trabajo superarlo.

-Changmin- Vio como lo miraba aún con esa mirada de tristeza y le sonrió para tranquilizarlo pero Changmin solo bajo la mirada y Yunho suspiró ­-Ven, necesitas un baño-

Él solo asintió y se dejo cargar, Yunho lo llevo hasta la tina y lo metió, sabía que al ser tan pequeño alguien lo bañaba pero por la situación sabía que no debería de tocarlo.

-Dejaré que te bañes y…- Estuvo a punto de salir cuando la pequeña mano de Changmin lo detuvo.

-No me dejes- Le rogó mientras las lágrimas volvían a salir de sus ojos –Por favor-

Yunho lo volvió a abrazar, no le importó mojarse y con su autorización de Changmin comenzó a bañarlo.

De vez en cuando un temblor de su parte lo detenía pero siempre lo dejaba continuar.

Se concentro en quitarle toda la sangre de su cuerpo y una vez que lo hizo le puso su ropa interior y ropa abrigadora porque a pesar del baño caliente su cuerpo estaba frió.

Lo recostó nuevamente sobre la cama y se agacho para darle un pequeño beso en su frente.

-Descansa, yo me encargare del resto-

Yunho estaba dispuesto a hablar a la policía y luego despertar a toda la familia y que supieran lo que le había hecho a Changmin, pero unos sonidos lo distrajeron.

Giro la vista y vio a aquel hombre despertando, ya había olvidado que se encontraba inconsciente en el piso, pero antes de hacer algo ya tenía a Changmin sobre él.

-Tranquilo, no permitiré que te haga daño de nuevo-Cuando se despertó completamente se encontró con la mirada furiosa de su cuñado y a su hijo quién temblaba en sus brazo –Me encargare de que todos se enteren de lo que le hiciste a Changmin, así que prepárate-

-No- La pequeña voz de Changmin llamo su atención –No se lo digas-

-De que estás hablando, después de todo lo que te hizo—

-Lo sé, pero yo…- Hizo una pausa- No quiero que mi madre sufra, se como lo ama, se como SuJin lo quiere y no quiero quitarles eso, no si es mi culpa-

-Changmin, esto no es tu culpa, él te lastimo y deben saber lo que te hizo-

-No por favor- Rogo –Tío, no quiero-

Yunho suspiro ante aquella suplica, Changmin simplemente no entendía que no era su culpa.

Giro a ver a aquel horrible hombre, cuando fue que cambio tanto, siempre había tenido de él la impresión de ser un buen hombre, desde que empezó a salir con su hermana, como esposo y finalmente como padre, lo que hizo realmente lo tenía en shock.

-De acuerdo- Le susurro a Changmin –Agradece a tu hijo que no diré nada, pero a cambio no volverás a pisar esta casa jamás-

Tanto Changmin como su padre pusieron una cara de estupefacción.

-Pero tío, quedamos en…-

-En que no le diría nada a nadie, pero eso no significa que quiera que siga aquí, tu decides Changmin-

-De acuerdo- Susurro no muy convencido.

-Lo siento Changmin, pero la única forma que tengo de protegerte es alejándote de él- Changmin no le contestó y nuevamente puso su vista en aquel hombre –Y en cuanto a ti, regresa a tu habitación y mañana hablaremos-

No hablo, simplemente salió, pero vio fijamente a Changmin y este sintió como su padre lo miraba molesto, así que solo escondió su cabeza contra su tío quién lo abrazo.

Una vez que salió, Yunho recostó a Changmin y él hizo lo mismo junto a él.

-Dime Changmin, desde cuándo-

Yunho no terminó de decir la pregunta y sin embargo Changmin entendió.

-3 meses-

-Y porque no dijiste nada-

-Porque…- Changmin sintió las lágrimas- Tengo miedo de que no me crean, tampoco quiero ver a mi mamá triste o a SuJin decepcionada, él es su héroe y no es solo eso, mi padre me amenazo con hacerle lo mismo a SuJin y yo… yo no quiero que ella sienta todo este dolor, no quiero-Yunho sintió un nudo en la garganta y se sintió tan conmovido por todo lo que había dicho, Changmin había dicho todo eso, había analizado las consecuencias, era mucho para un niño de 4 años, era como si tuviera unos 10.

Su hermana tenía razón, Changmin era demasiado inteligente para su edad y a la vez tan noble que estaba dispuesto a sacrificarse por la felicidad de quienes quería.

A pesar de todo seguía demostrando aquella naturaleza compasiva hacía el hombre que le había hecho daño; era como se Changmin no pudiera odiar.

-Entiendo- Lo abrazo –Ahora duerme, mañana todo terminara-

Changmin no tardo en dormirse, realmente estaba cansado y él se encargaría de protegerlo, no lo deñarían de nuevo.

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Changmin veía como su padre tomaba sus maletas y se dirigía hacia la puerta, su hermana no se soltaba de él y lloraba, rogándole que no se fuera, su madre estaba junto a él llorando.

Él día anterior su tío lo había obligado a pedirle el divorcio a su madre y que jamás volvería y al no dar explicaciones su madre le había pedido explicaciones pero no dijo nada.

-¡Papá!- Gritó SuJin- No te vayas, por favor, dinos porque-

Su padre se detuvo y volteo

-Pregúntenle a Changmin- Y sin más salió de la casa.

Changmin se sintió intimidado cuando su hermana y su madre se le quedaron viendo.

Inmediatamente su hermana se abalanzo hacía él tirándolo al piso, Changmin se asustó al ver el enojo en su rostro.

-¡¿Qué hiciste?! ¿Por qué papá se fue?

-Yo… yo no hice nada-

-¡Entonces ¿Por qué papá dijo eso?!-

Changmin se quedo en silencio lo que provoco que SuJin se enojara.

Las lágrimas de Changmin aparecieron cuando su hermana lo abofeteo para luego salir corriendo y encerrarse en su habitación.

Changmin se llevó su mano hacía su mejilla e intento no quebrarse pero fue en vano.

-Mamá- Sollozo –Mi hermana…-

Pero no obtuvo respuesta, giro a verla y notó que lo miraba fríamente

-¿Qué hiciste Changmin?-

Changmin sintió un nudo en su garganta ¿Por qué no le creían? Tal vez tenían razón, pero ¿No su tío le había dicho que no era su culpa? Así que se aferro a ello.

-Yo no hice nada- No contestó  – ¿Mamá?-

-Que el golpe que te dio tu hermana sea una lección, espero que me digas la verdad-

Changmin en ese momento sintió como si hubiera caído a un vacio.

No le creían, su madre y su hermana no le creían, uno de sus mayores temores se había vuelto realidad, ellos tenían una fe ciega en su padre y él se había aprovechado de eso, poniéndolas en su contra, al final su padre había ganado.

Changmin solo quería despertar de aquella pesadilla, sin saber que solo era el comienzo de todo su sufrimiento.

Todo desde ahí había caído en picada, Changmin intentó actuar normalmente, como si nada hubiera pasado, incluso sonreía pero sus intentos fueron en vano porque su madre y SuJin comenzaron a ignorarlo.

Solo le dirigían la palabra cuando le volvían a preguntar sobre lo que había pasado, pero jamás le creyeron.

La primera noche de tormenta después de que su padre se fuera fue una pesadilla, porque por más que esperaba a alguien nadie llego, así que se puso de pie y salió de su habitación.

Caminó hacía el cuarto de su hermana e intentó abrir la puerta, pero estaba cerrado, Changmin no lo entendía, las puestas siempre estaban abiertas cuando esto ocurría.

Así que caminó hacía el cuarto de su madre e intentó hacer lo mismo, pero sucedió lo mismo y ya sin opciones toco la puerta.

-¡Mami!- Toco fuertemente -¡Mami tengo miedo!-

-¡Cállate Changmin!- Escucho del otro lado -¡Y no eres un bebé, vete a tu habitación!

Changmin comenzó a llorar, odiaba en lo que se había convertido, él no lloraba con frecuencia pero ahora prácticamente lo hacía todos los días.

-Mami- Susurro  y toco nuevamente la puerta.

Pero esta vez no hubo respuesta, Changmin se deslizo por la puerta y se quedo ahí a pesar de ser tan inteligente Changmin aún tenía 4 años por lo cual aún buscaba el cariño de su padre y se quedo ahí titiritando de miedo y frió, esperando que su madre le abriera la puerta.

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Changmin entró a su casa y como siempre lo encontró vacía, suspiro y se dedico a prepararse de comer, después de todo sabía que su madre y SuJin no llegarían si no hasta muy tarde.

Ahora que lo pensaba ¿Cuándo había sido la última vez que las había visto?

En realidad ya no lo recordaba, ambas se aseguraban de no estar en casa cuando él lo estaba o llegar muy tarde para encontrarlo dormido, en pocas palabras no querían toparse con él.

A sus 15 años prácticamente se había criado solo…

Dio un vistazo rápido y no pudo evitar poner una sonrisa amarga al ver que prácticamente lo habían desterrado de la familia.

Ahí en la sala había una fotografía donde su padre aún estaba con ellos sin embargo su imagen había sido recortada, le dolió tanto cuando la vio por primera vez, ahora solo podía causarle malos recuerdos.

Así que sin más se dedico a prepararse de comer, su madre había dejado de prestarle atención, era como si él hubiera dejado de existir, dejo de hablarle, de cocinarle, de lavarle la ropa y Changmin tuvo que aprender a hacerlo, pero lo que más le dolía es que había crecido sin el afecto de su madre y su hermana y sobre su tío Yunho… pues él se había mudado a Japón, esa era la razón por la cual los habían visitado cuando cacho a su padre, se estaban despidiendo y su madre jamás quiso darle su número y durante tanto tiempo lo necesito, con el tiempo acepto que estaba y estaría completamente solo

Dejo esos pensamientos atrás porque simplemente no eran buenos para su salud mental y terminó lo qué estaba haciendo, una vez terminó de comer lavo los trastes que había usado y luego se fue a su recamara para poder dormir.

Al día siguiente despertó y realizo su misma rutina, desayuno y se alisto para ir a la escuela y como siempre la casa estaba sola.

Una vez en la escuela aceptaba su 10 por el trabajo que realizo y le costó mucho esfuerzo, al mismo tiempo  que ignoraba los cuchicheos y las malas miradas que le enviaban sus compañeros.

Porque no solo su vida familiar era un asco, sino también la social, porque simplemente todos lo odiaban por el hecho de que siempre sacaba buenas calificaciones.

Él siempre se había esforzado por lograr eso, y todo empezó cuando tenía 6 años, cuando vio como su madre le sonreía a su hermana por un 8 de calificación.

Al ver esto se esforzó lo más que pudo para sacar una buena nota, su recompensa fue un 10, aún recordaba lo feliz que estaba ante aquello, tanto que se apresuro por salir de la escuela e ir directo con su madre.

En aquel tiempo aún recordaba lo que se sentía el ser abrazado con cariño y anhelaba volver a sentirlo, su imaginación voló y se imaginó a su madre con una sonrisa felicitándolo, pero cuando lo hizo recibió el frio desprecio de su madre cuando le dio un “no me interesa”

Y Changmin sintió como si su esfuerzo fue en vano y sin embargo no se rindió, siguió dando lo mejor y en el proceso se olvido de convivir con más gente y al recibir siempre elogios de sus profesores y darlo como ejemplo a los demás, terminó ganándose el odio y desprecio de sus compañeros.

Changmin volvió a sacudir su cabeza, realmente no sabía que le pasaba, estaba recordando cosas que ya debió dejar atrás.

Pero al final no pudo evitar que una sonrisa se asomara en su rostro, porque había algo positivo en su vida, o más bien alguien.

Después de todo Shim Changmin estaba enamorado de su mejor y único amigo, aunque tenía mucho miedo de decirle sobre sus sentimientos, no quería perder a la única persona que lo entendía.

Había conocido a Lee KiWoo hacía unos 6 meses, poco después de entrar a la escuela, muchos de sus compañeros actuales habían ido con él en secundaria, pero él no lo conocía y ambos se llevaban bien.

A él no le importo lo que decían de él y Changmin estaba tan feliz después de tanto tiempo y aunque sonará mal querer a un hombre no le importaba.

Cuando se dio cuenta de sus preferencias no pudo evitar contárselo a su madre, eso hizo que por fin le pusiera atención después de mucho tiempo pero solo para golpearlo y decirle que le daba asco y su hermana le había gritado marica

Eso mismo era a lo que le tenía miedo, que KiWoo reaccionara de la misma forma, conociendo su “buena” suerte prefería estar así que echarlo a perder.

Camino lentamente hacía el patio de la escuela, viendo a KiWoo sentado bajo él gran árbol donde siempre se reunían.

Changmin respiró profundamente para controlar los nervios que lo atacaban cada vez que veía o se acercaba a KiWoo. Ya más calmado caminó hacía él y le sonrió, cuando le regreso la sonrisa Changmin podía jurar que tenía el corazón en su garganta, pero fingió no sentir nada y se sentó junto a él.

Estuvieron riendo y hablando de cualquier tontería hasta que comenzaron las clases, para su desgracia no iban en la misma clase, así que se tuvieron que separar.

Al día siguiente Changmin no lo encontró y con el pasar del tiempo se preocupó, porque era la primera vez que se ausentaba y la campana sonó, marcando el inicio de su clase.

Así de preocupado como estaba, no pudo prestar atención a clases por primera vez y cuando sonó el timbre de salida se dio cuenta que solo había escrito un par de garabatos y suspiro

En parte agradeció el ser un alumno de excelencia porque de esa forma los profesores no lo estaban vigilando.

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Changmin sentía como las lágrimas salían de sus ojos y por milésima vez se pregunto qué es lo que había hecho mal para sufrir de esa manera, hacía solo unas horas era simplemente feliz, porque hacía 3 meses estaba saliendo con KiWoo.

Cuando se desapareció aquel día hace 3 meses había estado tan preocupado por él y a la hora de la salida lo encontró en la entrada de la escuela, fue cuando le confesó que estaba enamorado de él, pero jamás le dio tiempo a contestarle que él también lo amaba, porque KiWoo simplemente salió corriendo de ahí. Después de eso se desapareció por 2 semanas, y él estaba simplemente desesperado por verlo.

Un día logro verlo y KiWoo al verlo intentó correr, Changmin le dio alcance porque simplemente no volvería a dejarlo ir, se armo de valor y por fin le confesó sus sentimientos, y ese fue el inicio de su relación.

Pero como siempre todo eso duro muy  breve, porque en ese mismo instante estaba siendo violado por KiWoo en el baño de la escuela, y se sentía tan mal por haber creído que alguien realmente lo quería.

Por que KiWoo solo había querido acostarse con él todo ese tiempo que fingió ser amable con él y se enojo con él cuando lo rechazo, porque a pesar que al principio quiso entregarse a él simplemente el recuerdo de lo que le hizo su padre no ayudo, y le pidió que se detuviera, aquello hizo que se enojara y ahora se encontraba en esta situación.

Era la segunda vez que le pasaba, y siempre eran personas que quiso, en esta ocasión era el hombre del cual estaba enamorado y eso dolía aún más.

No supo cuanto tiempo duró la tortura pero cuando termino simplemente se desplomo y perdió la conciencia.

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Frunció el seño cuando la persona que se encontraba del otro lado de la línea le dijo que tenía que ir a ver a su hijo, según el director estaba mal, y aunque intentó negociar  para ver si él podía regresar solo a casa simplemente no se pudo ya que declaró la salud de su hijo como crítico.

No le faltaban ganas de de decirle “un avíseme cuando este muerto”, pero no le convendría porque Changmin aún era menor de edad y eso aún le frustraba, le faltaban aún 3 años para soportarlo.

Así que con esa justificación salió de su trabajo, conduciendo hacía la escuela de su hijo, y una vez ahí fue directo a dirección y exigió una explicación.

Cuando el director termino de explicar la situación no pudo si no culpar a su hijo de lo que había pasado, pero fingió ser una buena madre y acepto el castigo para quién había “violado” a su hijo, pero la verdad no le podía importar menos, todo lo que le pasaba se lo tenía merecido ¿no su hijo le había dicho que le gustaban los hombres? Él solo lo había provocado.

De regreso a casa todo fue silencioso, Changmin no le había dirigido la palabra, se sentía tan mal. Solo quería llegar a casa y dormir, olvidar que KiWoo lo había violado, al parecer los baños tenían cámaras de seguridad y cuando le encontraron inconsciente en el baño averiguaron lo que había pasado.

El director le dijo que KiWoo iba a recibir su castigo, pero eso ya no le importaba, el daño ya estaba hecho.

Su madre lo ayudo a bajar del auto, ya que no podía caminar bien, entró a la casa y lo subió hasta su recamara, una vez dentro lo soltó y cayo directo al piso.

Sintió las lágrimas acumularse en los ojos y mordió su labio, no debía de llorar frente a su madre.

-Sabes que esto es tu culpa ¿Verdad?- Changmin no contestó y su madre se molestó -¡Te estoy hablando Changmin!

-Yo no hice nada- Su madre se rió.

¿Qué tenía de malo haberse enamorado? ¿Por qué era su culpa que lo hubiera engañado? porque al parecer no importaba lo que hacía, su madre siempre pensaba que todo lo malo que le pasaba era su culpa

-¿Por qué?-Susurro-

–Seguro te la insinuaste para que te cogiera y ahora resulta que es una violación-Volvió a reír

-¿Por qué piensas que es mi culpa? -

-Tú tienes la culpa por ser una puta- Changmin se quedo sin palabras ante aquello  y sin decir más salió de su habitación.

Changmin se quedo ahí, las últimas palabras de su madre se repetían una y otra vez en su mente, y algo se rompió dentro de Changmin…

Al día siguiente Changmin bajo de su habitación y escucho unas risas provenientes del comedor, viendo que eran su hermana y su madre conversando, era raro que estuvieran en casa sabiendo que él estaba ahí, pero simplemente no le dio importancia.

Llego al comedor y se sentó en una de las sillas recibiendo las miradas hostiles de ambas, pero simplemente las ignoro, viendo como se sorprendían ante su nueva actitud, no pudo evitar reír sínicamente al creer que siempre que encontraba a su familia intentaba llamar su atención, pero ahora qué más daba.

El Shim Changmin débil e indefenso que había llorado tantas veces por un poco de cariño había muerto anoche, su madre lo había asesinado con esas palabras, y se dio cuenta que había sido demasiado patético.

Se daba asco él mismo por ser un imbécil, así que simplemente hoy nacía un nuevo Changmin, no más el Changmin llorón que odiaba las tormentas y sentía el recuerdo de su padre, no más tristezas por no tener a alguien junto a él, de hecho sería una buena idea de ahora en adelante burlarse de sus compañeros por aquellas calificaciones mediocres que tenían.

Una sonrisa maligna adorno su rostro y su vista captó unos cigarrillos que le pertenecían a su madre y se encogió de hombros ¿Por qué no? Ahora era dueño de su vida, y sin arrepentimientos tomo uno ante la atónita mirada de su madre y sin más lo encendió.

-¿Qué demonios crees que estás haciendo?-

-Fumando- Le respondió sin remordimiento.

-¡¿Estás loco?! Eres menor de edad-

-Como si te importara- Le dijo mientras inhalaba aquella droga legal, Changmin sintió que aquello lo des estresaba- Además, como sabes que no he fumado antes- Le dijo con una tétrica sonrisa ­–No sabes nada de mi-

Se quedo de piedra, algo hizo clic en su cabeza, todos los recuerdos de Changmin vinieron a ella en un parpadeo.

Su nacimiento, su primera sonrisa, sus primeros pasos, siempre sonriéndole Y ahora ese chico de 15 años que fumaba mientras la miraba indiferente  no era aquel niño dulce, no lo era ¿Qué había sucedido?

Se dio cuenta que los últimos 11 años había estado evitándolo, haciéndole la vida imposible pero aún así Changmin  le sonreía cada vez que la veía, recibiendo su fría indiferencia.

Las palabras que le dijo a noche retumbaron en sus oídos una y otra vez, sintiéndose un monstruo y aunque intentó justificarse se dio cuenta que no podía, siempre le echo la culpa de que su ex esposo se fuera de su casa, pero jamás tuvo pruebas de nada.

Solo su palabra, Changmin siempre le dijo que él no había hecho nada, ¿Por qué no le había creído?

“Porque quisiste echarle la culpa a alguien de que no te amaba más, y que mejor que a quién él culpo”

Vio nuevamente a Changmin, y por primera vez supo que había cometido un horrible error, porque su pequeño ya no existía.

Continuara...

Siguiente>>>

Nota: Hola hola, lamento la demora, yo quería subir esto mas temprano, pero no más no pude, como ven esta parte es la historia que Changmin le cuenta a Taemin, la razón por la cual su hermana lo odia tanto y porque su madre intenta volver a ser amable con él, ya que la culpa la carcome, como sea el caso el siguiente capítulo nuevamente se enfoca en Taemin, sin embargo habla de como conoció a Changmin, de su relación y porque lo dejo sin decirle una palabra, espero que les haya gustado, me gustaría que dejaran su comentario, gracias n.n